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El proyecto CREMA (Cloud-based Rapid Elastic Manufacturing) busca desarrollar sistemas de control que, capturando datos en tiempo real y analizándolos simultáneamente, permitan prever averías en las máquinas herramientas y tomar acciones correctoras a tiempo
Las máquinas herramientas por deformación son equipos costosos que han de funcionar durante largos periodos de tiempo. Cada parada por avería supone un coste enorme no sólo en lo que concierne a su reparación sino en las pérdidas que la producción perdida suponen. Por ello, resulta de vital importancia la existencia de sistemas de control que permitan prever con antelación los problemas que la máquina pueda tener a través del tiempo para, así, poder tomar medidas a tiempo que eviten la detención de la instalación.
Fagor Arrasate está participando en el proyecto CREMA (Cloud-based Rapid Elastic Manufacturing) financiado por la Comunidad Europea que busca, precisamente, desarrollar herramientas informáticas alojadas en la nube para tomar, almacenar, monitorizar y evaluar numerosas variables de cada instalación determinando estrategias correctoras adecuadas con antelación, optimizando de este modo la producción de las empresas.
Todos los procesos se desarrollarán en tiempo real. Cuando el software ubicado en la nube detecta una variación sintomática de los indicadores de control, se lanza una alarma que buscará entre todo el conocimiento almacenado, cómo resolver la incidencia. El uso de la nube permite que se encuentren soluciones de manera colaborativa ya que podrán acceder a ella tanto los fabricantes, como el usuario o los proveedores.
El proyecto CREMA tiene una duración prevista de 3 años y se financia dentro del programa “Horizonte 2020” de la UE que, a su vez, se enmarca dentro de la iniciativa “Factories of the Future”. Participan en él, además de Fagor Arrasate, empresas como Ascora o Goizper y Centros tecnológicos como Ikerlan.